Laberintos
En "Por Laberintos", se explora el laberinto como símbolo cultural y como construcción social a lo largo del tiempo. La fascinación que ha ejercido sobre los humanos reside en los dilemas que nos plantean. Son un símbolo expresivo de la dificultad que siempre acarrea tomar decisiones y la angustia que nos produce no encontrar el camino de vuelta, o el camino acertado que nos lleva al centro, al corazón de las cosas. Sin embargo, una de las cosas que más me gustó de la exposición es la sugerencia de que es la memoria la que nos permite rehacer, reconstruir el camino para llegar al centro, y para volver de él. Y esta frase, de un físico catalán, Jorge Wasenberg, "el cerebro se inventó para salir de casa, y la memoria para volver a ella".
En "Por Laberintos", se explora el laberinto como símbolo cultural y como construcción social a lo largo del tiempo. La fascinación que ha ejercido sobre los humanos reside en los dilemas que nos plantean. Son un símbolo expresivo de la dificultad que siempre acarrea tomar decisiones y la angustia que nos produce no encontrar el camino de vuelta, o el camino acertado que nos lleva al centro, al corazón de las cosas. Sin embargo, una de las cosas que más me gustó de la exposición es la sugerencia de que es la memoria la que nos permite rehacer, reconstruir el camino para llegar al centro, y para volver de él. Y esta frase, de un físico catalán, Jorge Wasenberg, "el cerebro se inventó para salir de casa, y la memoria para volver a ella".
Es mejor disfrutar perdiéndose en el camino y descubrir nuevas cosas, y no angustiarse por la pérdida ;)
ResponderEliminarHay veces que es precisamente lo contrario, el labarinto de la memoria nos ayuda a perdernos, desorientados incoscientemente con el fin de eludir la evidencia que supone el camino recto. :)
ResponderEliminarlaberinto, se entiende ... (se me ha colado la "a") ;-P
ResponderEliminarEn mi último laberinto me temo que el cerebro engañó a la memoria con la técnica de pulgarcito, y por mas que traté de desandar mis pasos siguiendo los trocitos de palo que habia ido tirando, fue en vano. Solo la urgencia de la lluvia fue capaz de sacarme de allí a base de ensayo-error.
ResponderEliminarel nombre de laberinto es tambien un laberinto... que tonteria he dicho, me alegra tu vuelta Ver
ResponderEliminarSerá porque pone a prueba nuestra pericia, aunque si me dan a legir prefiero un prado de margaritas... no estoy para alardes.
ResponderEliminarme fascinan los laberintos y en ingles, el maze, ese tan alto como una, hecho de vegetación por el que te puedes perder como la ultima alicia de tim burton
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